Yo no coopero con la dictadura

Hay un viejo refrán que dice:
"Una mano lava a la otra y las dos lavan la cara" y otro más sabio: "En la unión está la fuerza".

Ya es hora de reconocer que ni a la ONU, ni a la UE, ni a Estados Unidos ni a la opinión internacional le interesan lo que está sucediendo en Cuba.

El problema de Cuba lo tenemos que resolver nosotros, los cubanos que deseamos una patria libre, pluralista, democrática, sin sectarismos políticos y con una amplia visión de futuro. Una Cuba que debe levantarse del dolor y del sufrimiento causado por mas de 50 años de tiranía.

Es hora de romper las cadenas que mantienen a nuestra patria esclavizada por el capricho y los intereses personales de un grupo que se ha entronizado en el poder a la fuerza, en nombre de una ideología falsa que solo ha servido para sembrar odios, persecusión implacable contra los opositores, violaciones a los derechos humanos, crimenes, vejaciones, injusticias, separación de las familias, miseria, corrupción, destrucción fisica y moral de nuestra nación...

Muchas son las lágrimas que ha derramado nuestro pueblo por la constante agonía de vivir sin esperanzas, porque ya se ha convencido de que ese futuro brillante, que le prometieron hace más de medio siglo y por el que se han sacrificado tantas generaciones de cubanos, nunca llegará mientras no se arranque de raíz ese sistema de gobierno obsoleto y absolutista detenido en el tiempo.

La cúpula militarista que hoy maneja todos los recursos económicos del país incluyendo los recursos humanos, ha demostrado ser ineficiente e incapaz de promover los cambios necesario para salir de la crisis permanente en que vive Cuba.

El gobierno de la Habana justifica sus fracasos con la crisis económica internacional y con el cacareado bloqueo que supuestamente Estados Unidos le ha impuesto a la Isla. Bloqueo que si existiera realmente como ellos dicen, en los mercados cubanos de recaudación de divisas, no hubiera productos norteamericanos, ni tampoco existieran las tantas agencias que mantienen negocios entre Estados Unidos y Cuba.

Bloqueo interno impuesto por el gobierno a través de un codigo penal absurdo, que inmoviliza todo tipo de creación y realización individual, sí existe aunque no lo quieran reconocer esas organizaciones y esos paises que dicen ser democráticos y que han demostrado ser defensores y aliados incondicionales de los dirigentes cubanos.

Si en Cuba todo fuera tan perfecto como lo quieren ver esos cómplices de la peor y más larga tiranía de la historia de este hemisferio, no tendría ningun sentido que tres millones de cubanos vivamos exiliados. Como tampoco tendría sentido que en Cuba los matrimonios no quieran tener hijos.

Es dificil de entender que en un país que se auto proclama una potencia de la salud, el 12 % de las mujeres en edad de procrear estén estériles; que no haya medicinas para los pobres que no tienen acceso al dolar y que los niveles de alcoholismo y de suicidios suban por años.

Quién puede entender la impunidad con la que actuán los traficantes humanos que promueven la prostitución de jóvenes (mujeres, hombres) y de menores. Quién puede entender y aceptar que la máxima aspiración de muchos cubanos sea fugarse del país y que la mayoría no lo hace por temor a correr la suerte de las víctimas del Remolcador 13 de Marzo, o de los secuestradores de la Lancha de Regla.

Es difícil de entender, para una persona como yo: " una cubana de a pie en el exilio", que existan tantos ciegos y sordos en el mundo ocupando los altos cargos políticos y supuestamente humanitarios a nivel internacional, más bien estoy por creer que son tan corruptos como los miembros del Comité Central del Partido Comunista de Cuba, porque han demostrado ser cómplices de la mafia comunista que hoy gobierna en Cuba.

Yo, para marcar mis diferencias con los ciegos y los sordos, me seguiré expresando en estas páginas para dejar bien claro que NO COOPERO CON LA TIRANÍA.

Esperanza E Serrano.