No creo tener la verdad absoluta sobre la realidad cubana. Pero por los 37 años que viví bajo el yugo de la tiranía, más los años de estudios y de observación sobre el acontecer cubano, creo tener suficientes elementos para dar una opinión sobre el tema en cuestión.
Les copio el comentario que le dejé al amigo (de blogación) Pomar.
08/06/2010 07:35
Esperanza said...
A estas alturas y a tanta distancia de la realidad, en una sociedad en la que, por más de medio siglo, ha imperado la doble moral, ya una no sabe de qué lado está la razón.
Mal andamos los cubanos que dudamos de todo, hasta de nuestra propia sombra.
Luego no pregunten por qué llevamos mas de cincuenta años en lo mismo. Lo peor es que a ciencias ciertas, no logramos ver la luz al final del tunel.
Pero la vida no se detiene. Nada es eterno. Con, y a pesar de, las contradicciones internas y externas, algun día Cuba será un hermosos jardín, una patria en la que todos sus hijos podamos reencontarnos.
Saludos
Esperanza.
Por ese comentario me gané la siguiente respuesta de Pomar:
"Mi querida Esperancita, con toda seguridad ya habrás colegido que todo lo argumentado hasta aquí vale también como respuesta a tu amable comentario. Así que, además de enviarte un caluroso (¡por fin hace de veras calor a orillas del Rhin!) saludo, apenas me queda en el tintero la tentación de sacarte de un gigantesco error histórico cometido de buena fe. A saber, el medio siglo largo de Castrato no se lo debemos a la manía de dudar de todo y de todos, sino al contrario: al fanatismo y la credulidad de la atávica "Generación del Centenario". Contra su mejor saber, se lo apostaron todo a ciegas al naipe marcado del nuevo caudillo y la violencia armada. Aún no se habían apagado los ecos del grandioso triunfo cuando ya casi todos ellos se largaban de la isla literalmente como su madre los parió, o sea, con una mano alante y la otra atrás.
El Abicú
08/06/2010 16:29
Pensando en esta respuesta creo que Pomar no anda errado cuando habla del fanatismo surgido en la mayoría de la población cubana a raíz de la toma del poder por parte del Fidel Castro y su grupo de mafiosos moncadistas. Es innegable que Fidel es un gran demagogo, un melómano con un gran poder de convencimiento, quien, apoyado ( además) por grandes campañas propagandísticas, ha podido pasearse por toda Cuba y por el extranjero como una linda y tierna ovejita y no como el feroz y despiadado lobo que es... (Su hermano trata de imitarlo, pero como todo buen imitador, está condenado al fracaso.)
Cuando leo a Pomar no entiendo del todo su matiz amargo, escéptico y su gran sarcasmo para tratar algunos temas. Como no lo conozco personalmente, no lo juzgo, sólo pienso que sus motivos tendrá para expresarse de esa manera. No obstante, creo que este hombre, tan inteligente, tan conocedor de la problemática cubana, y de la idiosincracia de ambas orillas ( segun él, ha militado en ambos bandos) a veces se olvida que, desde enero de 1959, Castro ha tenido opositores valientes que se le han enfrentado, arriesgando sus vidas y las de sus familias. A Pomar se le olvida de vez en vez las cifras de fusilados durante la guerra y los primeros años de la mal llamada revolución cubana. Se le olvida que muchos cubano (a) s, callaron, por cobardía, por complicidad, por conveniencia personal y no solo por fanatismo, aceptando pasivamente todo lo que el régimen decía. A partir de esos primeros años el cubano promedio aprendió a convivir y a vivir en la mentira, usando una máscara que le permitiera moverse libremente por toda Cuba y hasta por el extranjero. Máscara que también usa para burlar, sin buscarse problemas, las leyes absurdas que una a una la tiranía ha ido imponiendo a lo largo de mas de medio siglo.
Esa doble moral, a mi juicio, ha favorecido, en gran medida, la existencia, por más de cinco décadas de la tiranía castrista. Junto a la doble moral y como co-hacedor de la misma, está el miedo. El miedo en todas sus variantes: el miedo a buscarse problemas, a ser tildados de contarrevolucionarios, apátridas, traidores, escorias, problemáticos, conflictivos, enemigos del pueblo convertidos en parias, sin trabajos ni medios de subsistencia propios; el miedo a perder oportunidades o no saber aprovecharlas al máximo; el miedo a ser sancionado y a perder las posibiliaddes de mejores empleos, el miedo a no tener acceso a los recursos del Estado, a las fuentes de suministros tan necesarias para aquellos que les gusta meter la mano y robar y especular con las ganancias del mercado negro para beneficio personal, en detrimento de la cacareada colectividad, sin importarles si se trata de recursos y medios asignados por el propio estado a instituciones sociales, infantiles, juveniles, o de atención a enfermos de cualquier edad. La corrupción, el miedo y la doble moral son partes indisolubles del éxito del castrismo en el poder. Los momentos más culminantes de la tragicomedia carnavalesca cubana se refleja en las manifestaciones o desfiles de apoyo a la "revolución" con esas multidudes gritando consignas como ¡Comandante, ordene!,... Cuba Sí, Yankis No. para luego aplaudir desaforadamente los finales de ¡Patria o Muerte!
Todos sabemos que esas grandes multidudes que desfilan por la plazas se babean por todo lo que tiene que ver con Estados Unidos y el capitalismo en general. El modo de vida norteamericano les fascina, les encantan los dóllares y todo lo que lleve la etiqueta Made In USA. Muchos hacen lo indecible, cometiendo todo tipo de vilezas humanas, por tal de estar cerca del poder y disfrutar de sus mieles a aunque sea a nivel de municipio, de centro de estudio, de trabajo o de barrio. Además de sufrir la represión gubernamental, a ese y a otros problemas más, se ha enfrentado la oposición en Cuba por más de cinco décadas.
Al no existir una prensa independiente fuerte, con recursos sólidos para la competencia con la prensa oficialista, muchas cosas no pasan de ser hechos locales, aislados. Hechos que se conocen muchas veces por trasmisión oral con todo lo que esto atañe, porque cada cual los cuenta como se "lo imagina" o le conviene contar. Lo cual ´termina favoreciendo al régimen. Se tergiversan las aspiraciones, las intenciones, las motivaciones, las causas y las consecuencias y se duda de todo. Los que debiéramos de apoyar todo intento de acabar con la dictadura, la mayor parte de las veces nos erigimos como jueces y desde nuestras cómodas butacas de observadores pasivos, criticamos todo aquello que no se hace como nosotros deseamos que se haga - más para provecho personal que para el bien de la patria- Criticamos la huelga de hambre de Guillermo Fariñas, criticamos a las Damas de Blanco, a las de apoyo, a los disidentes, a los periodistas independientes, a los gobiernos de los municipios de la oposición, a las organizaciones anticastristas del exilio, a blogueros como Yoani, a Oswaldo Payá, a la iglesia catolica... Criticamos a Sasón melena y a toda su corte, pero no somos capaces de enjuiciarnos personalmente y respondernos con honestidad la pregunta de: ¿Y tú, qué has hecho para que las cosas en Cuba no sean como han sido hasta ahora en estas últimas decadas?
Espe,
ResponderEliminar¿y tu que has hecho?
Vaya, es solo una pregunta.
Ella?
ResponderEliminarvivir la dulce vida, vacilar y criticar como tu y yo y miles más, todos cangrejos,
jiji
Mi querida Esperanza,
ResponderEliminarMe situo frente al teclado y lo que veo no son las teclas, sino el fulgor en tus ojos mientras escribias este post.
Digna compañera del General Candela.
La coicidencia de pensamientos en nosotros, sobre la problematica cubana, tiene fuertes raices.
Sobre el comentario que Pomar escribe como respuesta al tuyo, me sorprendio, pues tenia a Pomar como un hombre de profundos conocimientos, pero este analisis tan superficial, sobre lo sucedido en Cuba hace cinco decadas, me ha hecho modificar bastante ese criterio.
Son muchisimos los cubanos que conocen la historia real de los miles y miles de fusilados, de los muertos en emboscadas, en "equivocaciones", en "accidentes con tiros escapados", luchando en las montañas, en los llanos, en las ciudades. Somos muchos los cubanos que sabemos y recordamos muy bien que los presos politicos llegaron a alcanzar la cifra de trescientos mil en los primeros 11 o 12 años, durante la "instalacion" de la tirania.
Somos muchos los cubanos que sabemos que, en algun momento de la decada de los sesenta, llegaron a alcanzar la cifra de 50,000 presos politicos simultaneamente.
Y mas del 90% de esos presos estaban alli por actividades que perseguian el derrocamiento de Castro. Y todos esos cubanos pertenecian a las generaciones de aquellos tiempos.
Con Casdro al moncada fueron algo mas de un centenar. El Ejercito Rebelde solo llego a tener unos tres o cuatro mil hombres. El movimiento 26-7 en las ciudades no pasaba, en toda la nacion de seis u siete mil.
Continuara.....
Cualquier experto en matematicas, graduado en la misma universidad donde Pomar (creo haber oido alguna vez que) fue profesor, se dara cuenta que existe una gran diferencia entre las cifras de los que lucharon en cada momento y en cada direccion.
ResponderEliminarLa realidad de aquellos tiempos solo se puede encontrar dentro de las astucias de Castro, que siempre tuvo un objetivo perverso oculto y, precisamente por esto, estaba preparado para "dar primero" en todas las escaramuzas que se presentasen.
Los cubanos defensores de la democracia y las libertades fueron aplastados por las astucias castro-sovieticas y una enorme campaña de propaganda, preparada con antelacion, que los demonizaba.
Es deber de todos los cubanos dignos, reconocer el sacrificio y la valentia y decision de aquellos cientos de miles de cubanos que lucharon, en las condiciones mas adversas y sin recursos ni apoyo logistico, porque Cuba no fuera sometida al castrismo y que hombres como Pomar y muchos mas pudiesen estar en la Patria enseñando en las universidades, viviendo, casi seguro, mejor que la inmensa mayoria de esos luchadores.
Es una deuda pendiente que tienen muchos cubanos que, cuando saliamos de la prision, nos viraban la cara y no nos saludaban porque no querian buscarse problemas por ser tildados de "amigos" de contrarrevolucionarios.
Un abrazo patriotico y cubanisimo,
Simon Jose Marti Bolivar.
Yo me cuento en el bando de los que no hemos hecho nada amiga Esperanza y como nada he hecho nada recibiré el día de mañana, ni quiero, ni lo pretendo pero duermo todos los día con la conciencia muy tranquila porque dentro de mi inactividad contrarrevolucionaria tampoco me he dedicado a verter mierda sobre los cubanos que aportan cada día su granito de sacrificio a la causa cubana, luchar por la libertad de Cuba aparte de ser un acto de patriotismo debe ser sobre todas las cosas un acto de fe, son tiempos de sumar, no de vigilar si Fariña toma 8 onzas de agua al día, o si Yoani posteo algún tema fuera del contexto político actual, en fin que lo mas importante y efectivo es trabajar sin miramiento por nuestro país, denunciar a los que nos han jodido la vida hasta la saciedad y convivir todos juntos sin mas pretensiones que las de ver un día no muy lejano a Cuba libre.
ResponderEliminarSaludos,amigos.
ResponderEliminarGracias por comentar en este blog
Empezaré por los anónimos:
15:06
Que he hecho?
En cada momento he actuado acorde con mis principios. He hecho lo que me ha correspondido hacer como la simple cubana de a pie que siempre he sido.
Anonimo15:07
Me hubiera gustado mucho haber nacido y crecido en un lecho de rosas, haber vivido la dulce vida vacilando todo el tiempo.Desgraciadamente no tuve ni tengo condiciones y mucho menos vocación para la vaciladera. Siempre he sido una persona demasiado recta, old fassion.Si mis genes fueran diferentes, me hubiera quedado en Cuba, vacilando el castro sucialismo, y hasta posiblemente estuviera libando la miel del poder.
Simon José muchas gracias por tus aportes a este tema y por ese gran amor que me tienes. Un beso
Asere, que bueno saber que estamos en el mismo bando. El bando de los que no hemos hecho nada y de los que no aspiramos a ocupar posiciones en una Cuba futura. Pero sobre todo, estamos en el sagrado bando de los que no critican a los que si están haciendo (o por lo menos itentan hacer) algo para que en Cuba las cosas cambien para el bien de todos. Un abrazo cubano y muchas gracias por tus comentarios en este blog.
Algun día Cuba será un hermoso jardín donde nos re encontraremos todos los cubanos como hermanos, sin odios, sin máscaras, sin sectarismo unipartidista,sin mezquindades...
Espe