CAMPAÑA MUNDIAL “SALVEMOS A ESOS HOMBRES, QUE LA PATRIA ORDENA”SALVE CASTRO, LOS QUE VAN A VIVIR, ESPUTAN (es decir, TE ESCUPEN Y SALUDAN)…
A Ariel Sigler Amaya, Guillermo Fariñas, Oscar Elías Biscet
y los otros hermanos en huelga de hambre
por la libertad de Cuba.
Igualmente para Reyna Luisa Tamayo Danger,
Las Damas de Blanco y el resto de los presos políticos
y opositores cubanos al régimen castrista
en donde quiera que se encuentren
Salvemos a esos hombres, cuya patria es la pena
que elijieron sus almas, como escudo en cadena
de ideales y espíritus, que apuran su condena,
sobre una isla cárcel, grillete por las venas
de un pueblo obnubilado, al son de las antenas,
ocultas con su angustia, como si fuera Atenas
minándose en Esparta, azorada y ajena,
aislada en su esperanza, ciudad que nos carena.
Salvemos a esos hombres, que viven hoy apenas
tapiados por ser libres guerreros que almacenan
el valor de un país, si el tirano es gangrena
milésima de un pueblo, salvado por la mena
que mana de esos hombres, y doma a manos llenas
la justicia que impone su libertad más plena.
Salvemos a esos hombres, sumidos por la arena
de un agua en dos orillas, que nos desencadena,
para que armemos juntos la patria que lo ordena.
José Antonio Gutiérrez Caballero
(JOSÁN CABALLERO)
Miami, 4 de marzo del 2010.
Santa Clara 5 de marzo, 2010
A: Raúl Castro Rúz
General de Ejército y Presidente de los Consejos de Estado y Ministros
de la República de Cuba.
General:
Como usted debe saber, cual viejo militar, los vínculos entre compañeros de armas son unas relaciones que van más allá de las ideologías políticas; como debe estar plasmado en los archivos de las Fuerzas Armadas Revolucionarias.
Quien suscribe fue combatiente en la República de Angola y de haber continuado en la vida castrense, ostentaría el grado de Coronel. Tres compañeros de armas míos, muy cercanos a usted, me han enviado sendos mensajes, para ponerme al tanto que usted dio las ordenes pertinentes, para que se me dejara morir, tras el escándalo internacional por el asesinato de Orlando Zapata Tamayo, y para que la huelga de hambre que llevamos a cabo un grupo de cubanos, cese.
Quiero decirle que me considero un auténtico patriota y reconozco que cuando único fui un mercenario, fue al servicio de la Unión de Repúblicas Socialistas Soviéticas y bajo sus órdenes en África. El hecho de que usted considere que mi muerte es necesaria, para mí constituye un honor, pues dice una estrofa de nuestro Himno Nacional, que “morir por la Patria es vivir”.
Por las actuales circunstancias que pasa mi Patria y mis hermanos de lucha, le agradezco el permitirme morir ante la opinión pública nacional e internacional, por mis ideas demócratas.
Que Dios se ampare de nuestra tierra y de su alma.
Guillermo Fariñas Hernández
Licenciado en Psicología.
Ex preso político en tres ocasiones
Bibliotecario y periodista independiente.
Super agradecido, amiga Esperanza, por tu anhelo mutuo de acoger la Campaña que he propuesto para ni cruzarnos de brazos hasta que se nos mueran nuestros mejores hombres, con los que contamos para emprender la libertad total, así que tenemos que lanzarnos a nuestra huelga de vida, para ganarle a la muerte y al fascismo castrista, disfrazado de revolución rebelde, esta batalla por los derechos primigenios de un pueblo, que debe alcanzar con sus propias manos algo tan preciado como vivir en paz, en la armonía de su familia y su comunidad. Eres una gran guerrera. te besa, Josán Caballero.
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