En 2015 la comunidad hispana de Estados Unidos tendrá una capacidad adquisitiva de 15 billones de dólares,
casi 12 billones de euros. Eso convertirá a ese colectivo de 50
millones de personas −mayor que la población de España− en la novena
economía del mundo.
Los
datos, extraídos de un reciente informe de la agencia Nielsen, hablan
de una población cuyas necesidades son poco atendidas por su país, a
pesar de que tienen la potencia de ser determinantes en sectores como el consumo de tecnología o los medios de comunicación.
Actualmente
EE.UU. tiene en el punto de mira las economías de Brasil, China, India y
Rusia (los conocidos como países BRIC); mientras que presta poca
atención al mercado hispano dentro de sus propias fronteras. Obviándolo
está perdiendo la oportunidad de atender las necesidades, y por ende
beneficiarse del crédito económico que generaría, de una comunidad cuya renta per cápita es mayor que la de Brasil, China e India. «El mercado hispano en EE.UU. es una gran oportunidad», apunta Roberto Ruiz,
vicepresidente de marca en Univision, la cadena de televisión en
español más grande de EE.UU. Según él, las empresas del país deberían
prestar más atención a los hispanos, sobre todo porque su población es
más joven y crece en franjas de edad clave como los menores de 50 años.
Ruiz recuerda que cada 30 segundos en EE.UU. dos no-hispánicos alcanzan
la edad de jubilación, mientras que un hispano cumple 18 años. Para Ruiz
existe una «nueva realidad americana»: la de un país dual en el que
todos los hispanos encuentren su sitio.
La
puntualización es importante. Y es que aunque a todos los hispanos se
los englobe en una única categoría, este es un colectivo heterogéneo.
Además de estar formado por un crisol de nacionalidades, culturas y
tradiciones; es una comunidad de personas que se han adaptado de manera diferente al país y su idiosincrasia. Los hay bilingües y monolingües. Monoculturales y biculturales. Más aculturados y menos.
La importancia de los hispanos
EE.UU.
está comenzando lentamente a darse cuenta del creciente impacto de los
hispanos en el país. En parte porque 2012 es año de elecciones
presidenciales y los candidatos de ambos partidos están buscando atraer sus votos, por lo que su presencia en los medios ha aumentado en los últimos meses. Aunque no solo por esa razón.
El
voto hispano será decisivo en los comicios del 6 de noviembre y aunque
sus papeletas suelen ir al partido demócrata, en esta ocasión Barack Obama no las tiene todas consigo. Como señala Curtis Gans,
director del Centro para el Estudio del Electorado Americano, la
población hispana suele ser conservadora en materias como el matrimonio
homosexual o la planificación familiar, por lo que Obama «probablemente
no tendrá tan buen resultado entre los latinos como en 2008, aunque será
similar porque el Partido Republicano les parece anti-inmigración».
Por
el lado republicano, a pesar de la patente hostilidad de parte de sus
miembros hacia este colectivo y de que Romney en sus últimas apariciones
ha omitido discutir su política de inmigración, el ex gobernador de
Massachussets tiene una oportunidad porque «los hispanos tienden a votar por un candidato y no por un partido», como advirtió Ruiz. La baza de Romney puede ser su alianza en la carrera hacia la Casa Blanca con Marco Rubio,
el político de origen cubano que ocupa el puesto de senador del estado
de Florida. Aunque la oposición de Rubio al DREAM Act, la ley que busca
fomentar la educación y proveer de ayuda financiera para sus estudios a
los inmigrantes, le granjeó críticas, su popularidad entre los hispanos
sigue pesando. «Independientemente de con quien se alíe, Rubio marcará
la diferencia porque es latino», subrayó Lucía Ballas-Traynor,
cofundadora y directora de la web Mamás Latinas.
El
otro lugar donde la huella hispana comienza a ser más visible en el
país es en las estadísticas. Los últimos datos censales revelaron que en
la última década más de la mitad del crecimiento poblacional del país fue en el seno de la comunidad hispana,
quienes representan ya el 16,3 por cien de la población total de EE.UU.
Y en lo que al mercado laboral se refiere, aunque tras la recesión el
paro haya vuelto a sacudir a esta comunidad, las proyecciones de centros
como el Pew Hispanic Center apuntan que en la década entre 2010 y 2012
los hispanos representarán tres cuartos del crecimiento de la población
activa del país.
Muy interesante este articulo, sobre todo las cifras. Me parece que en parte esa tendencia latina de ir tras el candidato en ves del partido en parte es negativa, pues en muchas ocasiones votamos porque sentimos al candidato cercano a nosotros ...culturalmente, porque es mexico americano o cubano americano, aunque en realidad no estemos de acuerdo con lo que piensa. Y sucede que cuando el candidato gane, va a promover lo que el cree o le conviene y no lo que nosotros queramos.
ResponderEliminarAunque por otra parte es cierto que tiene cierta lógica apoyar a los "nuestros" ...creo que todo depende de cada caso.
Creo que eso es bueno para quienes vivimos en EE.UU pues poco a poco nos tendran mas consideración en este pais y habran mas servicios y mas atención hacia nuestra comunidad.
ResponderEliminarY de manera indirecta, el crecimiento economico de la comunidad latina en EE.UU mejorara la vida en nuestros paises de origen