Translate

miércoles, 11 de enero de 2012

Partícula de polvo para un cordero izquierdista.


Te confieso que quisiera ser
una simple partícula de polvo,
pequeñita,
 casi invisible,
partícula procadora de  lágrimas,
catarsis de culpas y miedos,
 partícula de polvo
arrasadora de indiferencias.

Quisiera ser esa irresistible,
partícula de polvo,
capaz de romper tu equilibrio,
penetrar tu pupila,
rasgar tu retina,
desbaratar tu córnea,
romper tu dislocado 
ojo izquierdo
para que busques otro nuevo.

Quisiera ser esa
simple partícula de polvo
resistente a la pinza de cualquier cirujano.
Eficaz partícula de polvo
capaz de romper la rutina
de tu vida programada
por otros que te usan,
por esos otros que te llenan de odios
contra tus propios hermanos.

Quisiera ser esa piedra
enclavada en lo profundo de tu alma,
esa piedra  que te llene de angustias,
cual simple partícula capaz de renovarte,
de rehacerte,
de ayudarte a saltar del abismo
donde has enterrado
inúltilmente tu vida
de simple cordero,
tonto útil, sin pies ni cabeza
para andar por ti mismo
descubriendo verdades
ocultas en falsas promesas.

Por eso te juro,
cordero izquierdista,
te confieso
y declaro,
que quisiera ser
esa simple partícula de polvo
que te haga saltar lo que llevas por dentro.
Esperanza E Serrano

(Nueva Gerona, Isla de la Juventud, 1994,
 dedicado a Jesús Ortiz)

lunes, 9 de enero de 2012

Más sobre la esperada y ansiada reforma migratoria en Cuba,

Imagenes tomadas de internet:Balseros cubanos.

 Cubanos que salieron "huyendo" de Cuba regresan a la isla en viajes de visita:


¿Por qué la morosidad de la reforma migratoria en Cuba?
Por: Miguel Saludes
MIAMI, Florida, http://www.cubanet.org/ -
El año 2011 terminó en Cuba sin que se cumplieran las expectativas de una reforma migratoria que muchos esperaban con ansiedad.  Las especulaciones levantadas en torno a esa posibilidad y las esperanzas creadas sobre una apertura de puertas en doble sentido para todos los cubanos, los que viven en la Isla y fuera de ella, quedaron frustradas al concluir las sesiones parlamentarias en diciembre. La reunión de cierre dejó entrever que los cambios siguen en la agenda pero de producirse serían implementados de manera paulatina en un futuro sin concretar.
Explicar las razones para mantener con vida el aparente sin sentido que pone límites inexcusables a quienes desean viajar al extranjero imponiendo el permiso de la conocida carta blanca es un ejercicio hipotético fundamentado en la intuición y la experiencia vivida. Lo mismo ocurre con el reverso de la moneda en lo tocante a las entradas, cuestión que parece relegada a un plano menos imperativo que el asunto de las salidas.
Aunque deseable es improbable que las autoridades cubanas quiten las restricciones vigentes que ponen coto a las intenciones de quienes desean salir sin más documentación que los pasaportes y visados extendidos en consulados de los países donde se aspira a viajar. La posibilidad de que miles de ciudadanos con alta calificación salgan de manera expedita sin impedimentos  oficiales sigue pesando a la hora de tomar la determinación.  Es el caso, por poner un ejemplo, de aquellos relacionados con la salud pública para los que todavía existen trabas que impiden o alargan la posibilidad de emigrar. O visitar el exterior.
Dejar sin efecto las aquiescencias migratorias a unos y mantenerlas a otros considerados de interés, supondría una oleada de protestas y denuncias en la isla con repercusiones a nivel internacional. Puesto a escoger, el régimen prefirió dejar en suspenso la solución sin dejar de abonar el terreno esperanzador de la reforma progresiva. Aunque la noticia afectó a quienes tienen que conformarse con la espera del indulto concedido en los términos estipulados y que puede alcanzar cinco años, no era de extrañar.
En cuanto a las entradas es todavía un problema más complejo en el que no muchos insisten porque parece que es absurdo que alguien quiera regresar a Cuba en las actuales condiciones. No obstante existen personas que lo desearían. Uno de ellas, el activista por derechos humanos Adrián Leyva Pérez,  pagó con su vida por refrendar ese derecho. Un tema complejo sobre el que se ha indagado poco.
Por su parte el gobierno cubano no desaprovecha foro para quejarse de la Ley de Ajuste Cubano que otorga posibilidades de residencia pronta a los cubanos que llegan por cualquier medio  a Estados Unidos. Desde La Habana han calificado la medida como una fórmula criminal que privilegia a los cubanos y les estimula a abandonar su tierra.
La ley de Ajuste cubano tuvo como principal motivador la realidad confrontada por aquellos que escapaban de una realidad que no aceptaban y que no les dejaba espacio. Otros salían hacia un exilio forzado por la coyuntura política. A la persecución y el acoso del sistema contra sus detractores se sumaban penosas y largas prisiones o la amenaza a padecerlas. La aplicación de la receta “salidas definitivas” dejaba a los que se iban sin un amparo legal en su patria de origen. La última condena que les reservaba el totalitarismo era una existencia de parias en el mundo. Era el mismo destino que esperaban se cumpliera para los se iban de manera furtiva o no regresaban al cumplirse el tiempo reglamentario durante una visita o a través de la mal llamada “deserción”.
Contradictoriamente el gobierno cubano puede dar el paso que provoque el cese de esa medida y este consiste en  abrir todas las posibilidades, en este caso las del regreso también, a los ciudadanos que salen de su patria sin que por ello se les quite propiedades y derechos, incluidos el de regresar cuando así lo estimen pertinente sin tener que pedir autorización para ello.
Claro que eliminar las restricciones de entrada sea para los que desean hacer una visita temporal o para los que prefieren regresar tiene numerosas implicaciones en un sistema de controles donde la persona tiene sus libertades individuales a merced del Estado. Eliminar las restricciones significaría un reto enorme para un tipo de régimen que aprovecha el estatus a que tiene sometido a sus emigrantes como una espada lista a caer sobre ellos.  Una situación similar a la ocurrida con la emigrada cubana Leonila Hernández  sería difícil de armar y sostener en condiciones diferentes migratorias a las que imperan hasta el momento.
El desmontaje de la estructura que ayuda a mantener el miedo, la amenaza y el chantaje que pesa sobre los que quieren irse y los que desean seguir entrando, es poco probable que se produzca en fechas inmediatas. Mucho menos si el mecanismo insufla la llama que sustenta con su calor medidas como la ley de Ajuste, que la final rinde también sus beneficios a la parte de la Isla. Uno de ellos es mantener el freno sobre cientos de deportaciones actualmente pendientes a un cambio y que se producirían de cesar las razones que hasta ahora las impiden por cuestiones regulatorias o morales. Motivos más que suficiente como para que la parte cubana demore el mayor tiempo posible la solución viable de eliminar  todas las barreras que obstaculizan en ambos sentidos la libre circulación de sus ciudadanos.

sábado, 7 de enero de 2012

Cuba y la agonía del régimen



Por:Rogelio Alaniz


Las esperanzas de disponer de una ley de migraciones como la que tiene cualquier país normal se las llevó el viento. Raúl Castro, a diferencia de su hermano, se ha dado cuenta de que el régimen necesita algunos cambios pero no está dispuesto a jugar con fuego promoviendo una ley que precipite el derrumbe del sistema que él y su familia controlan con mano de hierro desde hace más de medio siglo.


Como todos los déspotas “que en el mundo han sido”, Raúl Castro tiene un olfato afinado que le permite registrar las mínimas oscilaciones que puedan poner en peligro al sistema. Con cinismo descarnado, no ignora que en las dictaduras comunistas la apertura de las fronteras producen estampidas en masa. Lo que ocurrió en Europa del Este puede replicarse perfectamente en Cuba. Los entendidos aseguran que de liberalizarse la ley de migraciones es muy probable que en la primera semana más de un millón de cubanos se vayan de la isla rumbo a cualquier parte, dominados por la certeza de que donde estén siempre van a estar mejor que en el ya célebre manicomio del Caribe.


Conciente de esos límites, Raúl Castro decidió no producir cambios y redujo todas las expectativas a liberar alrededor de tres mil presos comunes. Se trata en todos los casos de delincuentes que se hacinaban en las cárceles y que estaban generando serios problemas sociales. Los cubanos ahora deberán convivir con tres mil indultados, en la mayoría de los casos rateros y rufianes que abundan en esta isla que de manera perversa reprodujo los peores vicios de las dictaduras que en su momento dijo combatir.


La decisión de Castro, además de controvertida -porque dejar en libertad a delincuentes que están cumpliendo una condena es siempre riesgoso- es perversa, ya que pretende presentarse ante el mundo liberando presos comunes, mientras deja entre rejas a los presos políticos. Es el caso -por mencionar a los más conocidos- de Ivone Malleza, Ignacio Martínez e Isabel Alvarez Mosquera. Mientras que la noticia que se vendía en el mundo era la de la libertad de los detenidos y condenados, los presos políticos en serio, como los nombrados, eran trasladados a prisiones de máxima seguridad. Ivone e Isabel están en estos momentos en la cárcel de Manto Negro, una de las más aisladas y con un temible régimen carcelario, mientras que a Alvarez Mosquera lo han “alojado” en Combinado del Este, un presidio para presos de extrema peligrosidad.


Tampoco se ha dicho una palabra sobre las Damas de Blanco, la institución de derechos humanos creada por mujeres familiares de presos políticos y cuyo coraje civil es admirable por partida doble: porque lucha contra una dictadura que no vacila en movilizar a sus matones para agredirlas y porque libran una lucha ante el silencio cómplice de la mayoría de las instituciones de derechos humanos, instituciones que en las sociedades capitalistas protestan por las violaciones a la libertades cometidas contra la izquierda, pero se callan la boca cuando es esa misma izquierda en el poder la que mata, tortura y encarcela.


La presidente de esta institución, Laura Polián, murió el 14 de octubre del 2011, y a pesar de que los reclamos acerca de la necesidad de investigar su muerte son cada vez más amplios, el gobierno no ha dicho una palabra al respecto. Laura Polián se descompensó de la noche a la mañana y murió en el Hospital “Calixto García”, donde fue internada y a sus familiares y compañeros les impidieron seguir de cerca las vicisitudes del tratamiento.


La sospechas de que a Laura Polián pueda haberle pasado algo diferente a una muerte “sorpresiva” son cada vez más amplias. Motivos hay para desconfiar. En Cuba, desde los tiempos de la revolución, las muertes sospechosas han sido constantes. Al respecto, conviene mencionar la de Camilo Cienfuegos, cuyo accidente aéreo nunca terminó de esclarecerse, como bien señala Carlos Franqui en su biografía. Otro tanto puede decirse del suicidio de Haydée Santamaría, uno de los mitos de la revolución. O de la sorpresiva y reciente muerte de José Abrantes, que en algún momento fue ministro del Interior del régimen hasta que cayó en desgracia.


Decía que Raúl Castro, a diferencia de su hermano, percibe la necesidad de promover algunos cambios porque el sistema tal como está no da para más. Los cambios son tímidos, signados por las idas y venidas, los miedos y los periódicos rebrotes autoritarios. Fidel Castro, mientras tanto, se pierde progresivamente en las nieblas de la senilidad. Divaga en el aire, cuando se enoja promete el retorno al poder, él mismo se ha atribuido el rol de profeta internacional, pero a esta altura nadie en la claque del poder lo toma en serio.


Como su hermana Angela y su hermano Ramón, Fidel ha sido derrotado por el Alzheimer. O para ser más piadosos, por los años, por la vida. Lo que le sucede a él no es diferente a lo que le ocurre a cualquier mortal, pero la diferencia es que personalidades de este tipo se niegan a admitir que el tiempo implacablemente hace su trabajo y no distingue derecha o izquierda, revolucionarios y contrarevolucionarios. Al respecto, no deja de ser una ironía que un político que siempre dijo ser ateo como Fidel, se resista a admitir que los ciclos se cumplen, que si no hay eternidad en el cielo mucho menos la hay en la tierra, donde la muerte siempre llega.


Fidel Castro de hecho se ha ido, pero la dictadura que él ha montado se mantiene: resquebrajada, sin horizontes, sin ideales, pero allí está. A la mística de la revolución se le ha exprimido hasta la última gota de jugo. Hoy más que un mito es una caricatura, una caricatura de la que algunos se burlan y que otros padecen. Los primeros que no creen en ella son los jerarcas del partido, para quienes el problema se reduce a sobrevivir como pueden y a eludir las trampas que una burocracia perversa reproduce periódicamente. También, de ser posible, a beneficiarse con las oportunidades que brinda un régimen venal y corrompido.


Las salidas que se presentan hacia el futuro son diversas, pero en todos los casos lo que se mantiene intacto es el régimen totalitario. Un régimen totalitario sui generis, porque en Cuba nadie cree en nada o, para ser más preciso, nadie cree en la leyenda de la revolución, el hombre nuevo y la sociedad igualitaria. Hoy Cuba no sólo no es una sociedad igualitaria, tampoco es solidaria. No hay solidaridad, las libertades están ausentes y faltan oportunidades. Tampoco hay solidaridad cuando, como consecuencia de la dictadura, la sociedad se despolitiza.


Hoy, en Cuba, el hombre de la calle está preocupado por sobrevivir. La política no le interesa no sólo porque está apremiado por las necesidades, sino porque los únicos autorizados a opinar de política son los jerarcas del partido y el Estado. Una vez más es necesario insistir que la dictadura no sólo despoja de libertades y oprime, sino que impide la participación política. O la única que autoriza es la oficial, que al ser exclusiva ha dejado de ser política para transformarse en una burocrática administración de las cosas.


Desplazado Fidel, el poder en Cuba parece estar en manos de su hermano y en los círculos de la élite se habla de que, además, ya está designado el sucesor. Se trata de Alejandro Castro Espin, hijo de Raúl y supuestamente capacitado para tomar las riendas de la dictadura. Como en Corea del Norte, el comunismo sustituye el paradigma democrático de la modernidad por el despotismo y la monarquía absoluta.


Si el poder amenaza consolidarse en manos de una familia, el poder real sigue residiendo en las fuerzas armadas y el control de las empresas públicas. El Partido Comunista como tal hace rato que se ha reducido a una burocracia que cumple tareas simbólicas y administrativas. La dictadura es, por sobre todas las cosas, dictadura militar. Es allí, en sus feroces internas y sus oscuras y sórdidas conexiones con el poder económico, donde se resolverá el futuro de la isla. Las salidas visibles, de todos modos, no son una incógnita: o se ensaya una salida a la vietnamita con liberalización económica y dictadura política, o se hace una salida a la rusa, con una burocracia rapaz y corrupta que privatizará las empresas públicas y constituirá una oligarquía a cuyo lado los orondos burgueses de Miami no serán más que modestas y tiernas palomas.

Fuente:

http://www.ellitoral.com/index.php/diarios

martes, 3 de enero de 2012

La Iglesia Católica y la tiranía castrocomunista

(Imagen tomada de internet: El Papa Juan Pablo II saluda y bendice a Fidel Castro durante su visita a Cuba en enero de 1998)

La alianza entre el Vaticano y la mafia de La Habana no traerá cambios sustanciales para el pueblo cubano.
La Iglesia Católica busca afianzar su posición dentro de Cuba, de ahí que en las últimas décadas ha hecho todo lo posible por estrechar lazos con la dictadura  castrocomunista. Lazos que comenzaron cuando todavía Fidel Castro estaba al frente del gobierno y del PCC, y  que se han estrechado con el gobierno de su sucesor Raúl Castro.
Justamente cincuenta años después  de que el Papa Juan XXIII le impusiera la pena de la excomunión a Fidel Castro el 3 de enero de 1962, la Isla se prepara para la visita del Papa Benedicto XVI.

"El Papa Juan XXIII le aplicó a Fidel Castro la pena de excomunión después de declararse marxista-leninista y anunciar que conduciría a Cuba al comunismo, en su histórico discurso de 2 de diciembre de 1961, además de mostrar su hostilidad manifiesta hacia la religión católica con la expulsión de 131 sacerdotes y el cierre de escuelas religiosas.
Por lo tanto, Fidel Castro, como bautizado y miembro de la Iglesia Católica, fue excomulgado por Juan XXIII.
El conocido como «Papa bueno» se apoyó para ello en el decreto de Pío XII (1949) elaborado por la Congregación para la Doctrina de la Fe, que estableció la pena de excomunión para todo aquel que difundiera el comunismo, una ideología que combatió el Vaticano desde el siglo XIX y en el XX con más ahínco vistos los resultados de la revolución rusa (1917).
Benedicto XVI viajará en marzo a México y Cuba, en su segunda visita a Iberoamérica -estuvo en Brasil en 2007- y primera a países de habla española en la región.
El presidente Raúl Castro, hermano de Fidel Castro, aseguró el pasado 18 de diciembre que Cuba recibirá al papa Benedicto XVI con «afecto y respeto», una visita que coincide con el Año Jubilar en Cuba por el IV Centenario del hallazgo de la imagen de la Caridad del Cobre, la patrona de la isla.
Aunque aún no se conocen los pormenores de la agenda que desarrollará Benedicto XVI, es previsible que uno de los actos centrales tenga lugar en el Santuario del Cobre, en la provincia oriental de Santiago de Cuba, donde se guarda la imagen de la Virgen de la Caridad, que fue coronada personalmente por el papa Juan Pablo II el 24 de enero de 1998, durante su visita a la isla.
Sin embargo, no hay constancia oficial de que el papa se reúna con Fidel Castro, cuya excomunión nunca ha sido levantada.
Fuente:

domingo, 1 de enero de 2012

La visista del Papa Benedicto XVI a Cuba será del 26 al 28 de marzo

(Foto tomada de internet)
Papa Benedicto XVI y el Cardenal Jaime L. Ortega y Alaminos

LA HABANA (AP) — El Papa Benedicto XVI visitará Cuba entre el 26 y el 28 de marzo y será recibido a su llegada a la isla por el presidente Raúl Castro, informó el domingo la Conferencia de Obispos Católicos de Cuba.
El Santo Padre llegará a la isla procedente de México y su primera escala será en la ciudad de Santiago de Cuba, a unos 950 kilómetros de la capital, el 26 de marzo en horas de la tarde.
"Será recibido oficialmente por el Presidente Raúl Castro Ruz, por la Conferencia de Obispos Católicos de Cuba y por el Sr. Arzobispo de esta Ciudad (Dionisio García)", señaló la nota enviada a la prensa por la Conferencia de Obispos Católicos de Cuba.
El Papa Benedicto XVI anunció oficialmente el 12 de diciembre que visitará Cuba y México. Esta será la segunda visita papal a la isla caribeña, tras el histórico viaje que realizó Juan Pablo II en enero de 1998.
El presidente cubano aseguró en días recientes que Cuba acogerá con "afecto y respeto" al Papa Benedicto XVI.
De acuerdo al programa aprobado por Benedicto XVI, éste oficiará una misa en la Plaza de la Revolución Antonio Maceo de Santiago de Cuba poco después de su llegada a esa ciudad.
El viaje del Papa coincide con el Año Jubilar 2012 en el que se festeja en la isla el IV Centenario del descubrimiento de la Virgen de la Caridad del Cobre, la Patrona de Cuba.
La imagen de ésta virgen culminó el 30 de diciembre un recorrido por toda la isla que inició en agosto de 2010 y que incluyó paradas en iglesias, escuelas, hospitales, plazas y hasta cárceles del país.
La información precisó que durante su estancia en Santiago de Cuba, Benedicto XVI se hospedará en la residencia de los sacerdotes en el Santuario del Cobre, y al día siguiente de su llegada visitará el lugar.
En la tarde del 27 de marzo el Papa se trasladará a La Habana, donde en horas de la mañana del 28 de marzo "presidirá la Santa Misa en la Plaza de la Revolución" capitalina, de acuerdo a la nota de los obispos. En la tarde finalizará su visita oficial a la isla.
La visita a Cuba y México será la segunda de Benedicto XVI a América Latina y la primera a países de lengua castellana. Antes asistió en el 2007 a la Conferencia de Aparecida, en Brasil.
Fuente:
http://es-us.noticias.yahoo.com/cuba-visita-papa-26-28-marzo-231831153.html

sábado, 31 de diciembre de 2011

viernes, 30 de diciembre de 2011

Los habaneros celebrarán el Fin de Año con una gran misa en la capital.


La peregrinación de la Virgen de la Caridad del Cobre culminará esta noche, 30 de diciembre del 2011, con una gran misa en La Avenida del Puerto,  Habana, Cuba

Dictadura y religión: El porqué de su alianza táctica.

por: Antonio Arencibia, La Coruña, España

¿Qué pueden tener en común la comunión de un candidato presidencial otrora ateo, la sanación de un dirigente por intercesión divina o de los santos populares, y una procesión en Cuba con la imagen de la Virgen? Pues sí, tienen muchísimo en común: son las nuevas mañas de que se valen los caudillos para su perpetuación en el poder. Claro que ahora la religión no es el nuevo “fantasma que recorre Europa”, (y América, y Medio Oriente y llega hasta China), porque no viene por su propio peso, sino que la traen de la mano unos viejos políticos que renuevan su imagen con el apoyo de prelados, monjes y muftis. ¿La traen, o la religión organizada se deja llevar? Para empezar a dilucidar esta cuestión tenemos que revisar la historia reciente, y ver hasta que punto la relación actual en Cuba entre Iglesia y régimen es la norma o la excepción.

Empecemos por un ejemplo poco conocido por los cubanos. Saddam Hussein, que implantó en Iraq el laicismo característico del partido socialista árabe BAAS, decidió jugar la carta religiosa durante su guerra con Irán, apoyándose en los musulmanes de la secta suní contra los chiítas iraníes. Llevó esa manipulación hasta inventarse una genealogía que lo hacía figurar como descendiente del Profeta del Islam. Luego hizo construir tres mezquitas, una de ellas en Bagdad con el nombre de “La Madre de Todas las Batallas”, cuyos minaretes tenían la forma de misiles Scud.

La estrafalaria y sospechosa devoción de última hora de Saddam lo llevó, según dicen, a donar su sangre durante dos años, - más de siete galones- para escribir con ella un ejemplar del Corán, que hoy en día, -a cinco años de su ejecución en la horca-, sigue guardado, pues el libro sagrado del Islam no puede ser destruido. Toda la estrategia pro suní del derrocado dictador ha cambiado con la invasión norteamericana y la entrega del poder a la mayoría chiíta iraquí.

En otro ejemplo más afín a la realidad cubana, el cambio de enfoque del Partido Comunista Chino respecto a la religión, ha sido notable desde mediados de la década de 1980. Aunque la Constitución china estipula que ningún órgano estatal, organización o individuo puede obligar a los ciudadanos a creer o no creer en religión alguna, ni puede discriminar a los ciudadanos por esos motivos, esto no se cumple en el caso del cristianismo, del islamismo de la minoría étnica uigur y de los lamaístas tibetanos. La protesta de estos últimos ha llevado algunos monjes a la auto inmolación tras gritar: “Libertad para el Tíbet”.

No obstante, los comunistas chinos han estado favoreciendo otras religiones, como el budismo y el taoísmo, consideradas más cercanas culturalmente a la mayoría étnica Han. Así, autorizaron un masivo programa de reconstrucción de templos, muchos de ellos destruidos durante la llamada Revolución Cultural. Hace pocos años, el presidente Hu Jintao resaltó la importancia de las obras de caridad religiosas, porque ayudan a resolver problemas sociales, y recientemente el gobierno chino organizó conferencias internacionales sobre el Budismo y el Taoísmo. A esta última asistió Jia Qinglin, uno de los principales dirigentes partidistas chinos, y participaron 500 delegados de más de 20 países.

Según reporta el NYT Magazine, “los chinos están en medio de un gran despertar religioso. En las ciudades, los jóvenes profesionales miran hacia el cristianismo. El budismo atrae a la clase media, mientras el taoísmo ha renacido en las pequeñas poblaciones y en el campo”. No obstante, a pesar de dar acceso en sus filas a ricos y millonarios, el PC Chino mantiene la contradicción de abogar porque sus miembros rechacen toda religión. Pero la contradicción mayor es que el papel creciente del mercado está cambiando la vida y costumbres de los chinos.

Por eso, el 25 de diciembre será fecha muy bienvenida por la población de Xitan, en la provincia de Zhejiang, que es llamada la “Aldea Navideña de China” porque tiene 240 fábricas y empresas que se dedican a producir adornos de Pascua. Hay que señalar que el valor millonario de esa producción no solo procede de su exportación a Occidente, sino del mercado nacional, porque ya millones de chinos empiezan a adornar sus arbolitos de Navidad cada año. Por su parte, los centros comerciales y hoteles de las ciudades chinas se han decorado e iluminado para estimular un ambiente propicio a esta temporada de ventas y regalos.

¿Será que los líderes comunistas han comprendido que la religión puede ayudarlos a mantener el control social, adormeciendo con una inyección de “opio” al sobre- explotado pueblo chino?
El chavismo juega la carta religiosa
En América Latina la historia reciente abunda en ejemplos de manipulación religiosa por parte de dictadores y caudillos populistas. Pero la posición de Hugo Chávez en este asunto no ha sido precisamente coherente, lo cual no extraña, teniendo en cuenta que ni siquiera lo es en su definición del “nuevo socialismo” que pretende instaurar en Venezuela. Fue más bien una simulación de humildad cristiana el tono de voz lacrimoso del Teniente Coronel cuando emergió, crucifijo en mano, en abril del 2002, tras ser liberado de sus captores al fracasar el golpe de estado en su contra. Aquella invocación suya “a Cristo, a Dios nuestro Señor” y su petición de “paz espiritual” para todo el país, no duró mucho. Durante un discurso en la Asamblea Nacional se dirigió al representante de la Santa Sede acusando al actual cardenal-arzobispo de Caracas, Jorge Urosa, e igualmente “al anterior cardenal”, de haber sido golpistas en el 2002

“Mándele un mensaje a su Santidad... Mientras manden estos obispos aquí, nos sentiremos bien alejados” de la jerarquía católica, dijo Chávez al Nuncio, y después hizo pública su intención de revisar el convenio de Venezuela con el Vaticano que le da ciertos privilegios económicos a la Iglesia Católica.

Pero de parte y parte casi toda esta confrontación cambió con la grave enfermedad de Hugo Chávez.

Ahora, la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV), que ha criticado al gobierno chavista porque su proyecto socialista va contra la Constitución de Venezuela, ha pedido a los fieles católicos orar por la salud del presidente, y ha enviado un mensaje a otras iglesias cristianas en Venezuela para que también lo hagan. Chávez, que ha declarado varias veces que es marxista, ha estado subrayando que “antes de ello, y más profundamente”, es cristiano. Así, el 12 de julio de 2011, en la Academia Militar de Caracas, el Obispo de San Cristóbal, monseñor Marino Moronta, presidió la eucaristía por la salud de Chávez y le administró la unción de los enfermos. En otro servicio religioso celebrado en agosto en el Palacio de Miraflores, el supuestamente recuperado líder, reconocía a sus sanadores: “El primer doctor se llama Jesús de Nazaret, el más alto de los curanderos, el segundo es Fidel, y el tercero es el equipo médico”.

Sin salirnos del ámbito cristiano, el 18 de agosto, miembros de 50 iglesias evangélicas celebraron una plegaria ecuménica por la pronta recuperación del mandatario enfermo, y el 8 de septiembre Chávez celebró la fiesta de la Virgen del Valle, patrona del oriente venezolano, proclamando la fecha Día de Júbilo Nacional. También, y en el marco de otras devociones católicas, está la visita que hizo Chávez el 20 de octubre, al regresar de su tratamiento médico en La Habana, al santuario del Cristo de La Grita, en el estado Táchira. Al llegar en peregrinación dijo a la prensa: “Quiero dar gracias a Dios y por eso la promesa al Santo Cristo de La Grita. Vine a presentarme al jefe, al comandante de los comandantes, al Cristo Redentor”.

Días más tarde, el 26 de octubre, se celebraba el nacimiento del médico José Gregorio Hernández, considerado santo por muchos venezolanos y extranjeros, aunque la Iglesia no ha terminado el trámite de su canonización que requiere la “comprobación de curas milagrosas”. Y fue en esa ocasión en la que Hugo Chávez declaró lo siguiente: “Me anoto en la lista de los que hemos sido bañados por el milagro del siervo de Dios, me siento parte de esa legión de hombres y mujeres de los que vivimos gracias a los milagros”. De inmediato también declaró la fecha Día de Júbilo Nacional.

Tampoco el caudillo dejó pasar la fiesta del 11 de noviembre, festividad de Nuestra Señora de Chiquinquirá, “la Chinita”, como llaman los venezolanos a esta advocación de la Virgen. No asistió a Maracaibo como se esperaba, pero escribió en su cuenta oficial en twitter: “Chinita de Maracaibo, Chinita de Venezuela, ¡contamos contigo para seguir viviendo, para seguir haciendo Patria! ¡Patria para tus hijos mi Chinita!”.

No podemos descartar en este recuento el bilongo de sanación celebrado en Miraflores, y el culto conjunto en La Habana de los afrodescendientes cubanos y venezolanos, donde se invocaron a los orishas Babalú-Ayé y Oshun, y a las deidades María Lionza, el Gran Cacique Guaicaipuro, y el Negro Felipe.

Tales manifestaciones del sincretismo religioso popular fueron manipuladas con consignas políticas. Podemos decir que todas esas rogativas, ceremonias y profesiones de fe por y de Hugo Chávez, que contaron con la muy activa participación de diversas instituciones y organizaciones religiosas, pueden haber convertido su enfermedad y posible curación en un elemento electoralmente favorable al continuismo chavista en las presidenciales de octubre del 2012.
La “conversión” de Daniel Ortega
Pero donde podemos encontrar semejanzas notables con la actualidad cubana es en la transformación del radical Comandante Daniel Ortega de la década de los ochenta en el presidente “devotamente católico” de la Nicaragua del siglo XXI. Lo más sorprendente no es solo el cambio de Ortega, también lo es el de Monseñor Miguel Obando y Bravo, acusado en los ochenta por el Gobierno Sandinista de ser “archienemigo de la revolución”, y de buscar ayuda a favor de la Contra con el gobierno de Reagan.

El acercamiento entre los dos viejos enemigos se remonta a abril del 2005, cuando sorpresivamente Juan Pablo II aceptó la renuncia canónica del cardenal Obando como arzobispo de Managua por razones de edad y lo sustituyó por el entonces obispo de Matagalpa, Leopoldo Brenes Solórzano. Entonces Daniel Ortega, que era líder de la oposición, ofreció respaldo a Obando, y cuando alcanzó la presidencia en las elecciones de noviembre del 2006, nombró al cardenal dirigente de la Comisión de Paz y Reconciliación.

Como cuenta el periodista de El País Carlos Salinas Maldonado, ya en el 2004 Obando había oficiado una misa en celebración del 25 aniversario del triunfo sandinista, y por su parte Ortega le había pedido perdón públicamente por sus “errores del pasado”. Según Salinas, la alianza quedó sellada cuando el cardenal casó a Daniel Ortega y su compañera Rosario Murillo en septiembre del 2005.

Entre los opositores católicos al acercamiento de Obando con Ortega está Humberto Belli, ex ministro de Educación en los gobiernos de Violeta Barrios y Arnoldo Alemán. A Belli, figura importante del Opus Dei, se le atribuye haber fraguado en el Vaticano la aceptación por el Papa de la renuncia de Obando. Otros críticos del cardenal opinan que éste actualmente tiene muy poco peso dentro de la Iglesia y entre el pueblo, que repudia su coqueteo con el sandinismo, y creen que su rol al frente de la Comisión de Paz viola lo establecido, pues a los obispos se les prohíbe ocupar cargos públicos tras el retiro. Pero para los católicos que le apoyan, las relaciones del purpurado con Ortega lograron que los diputados sandinistas se sumaran en el 2006 a la legislación que castiga con penas de cuatro a ocho años de cárcel la realización de abortos terapéuticos en Nicaragua.

Ortega, que nunca comulgó ni se le vio en misa, lo hace ahora tras su boda por la Iglesia con Rosario Murillo. Desde entonces, y cada año con mayor fuerza, en vísperas del 8 de diciembre Daniel Ortega y su esposa asisten en la Plaza de la Revolución de Managua a los festejos religiosos de la Inmaculada Concepción. Así utilizan la festividad conocida como “La Gritería”, tradición de extraordinario arraigo en la población nicaragüense, para sus fines políticos. Por esa misma razón, el Frente Sandinista para la Liberación Nacional (FSLN), llevaba como lema que Ortega, su candidato a la presidencia, es “cristiano, socialista y solidario”. La “conversión” de Daniel Ortega fue eficaz: en los comicios del pasado 6 de noviembre obtuvo más del 62 por ciento de los votos emitidos, y ganó un tercer término presidencial.
Neocastrismo con visita y jubileo de la Caridad del Cobre
La visita de Benedicto XVI en el 2012 será la segunda de un Pontífice a Cuba. Es una muestra de la atención que otorga el Vaticano a la Isla, y -si exceptuamos las nueve del Papa Wojtyla a su Polonia natal- marcará récord de viajes papales a un país comunista. Desde el punto de vista religioso, la agenda del Papa Ratzinger se centrará en la conmemoración del cuarto centenario de la Virgen de la Caridad del Cobre, que fuese coronada como Reina y Patrona de Cuba por Juan Pablo II en 1998. Como parte de los preparativos para esa celebración se ha llevado a cabo la procesión con la imagen del Santuario de El Cobre por toda la Isla, por primera vez en medio siglo.

La peregrinación culminará este 30 de diciembre con una gran misa en la Avenida del Puerto, como anunciara por la televisión estatal el cardenal arzobispo de La Habana. Pero además de esta inusitada presentación de Jaime Ortega, distintas emisoras de radio provinciales autorizaron el pasado 8 de septiembre, alocuciones del arzobispo de Santiago de Cuba y de los obispos de las diócesis de Pinar del Río, Bayamo-Manzanillo, Holguín-Las Tunas y Guantánamo-Baracoa, por la festividad de la Virgen del Cobre. Aparte de la peregrinación central ese día se llevaron a cabo dos grandes procesiones, una en la ciudad de Pinar del Río y otra en la de Santiago de Cuba.

Hay elementos patrióticos que ha sido muy resaltados por los prelados y sacerdotes cubanos en alocuciones y homilías en este año. Primero, que la declaración en 1915 de la Virgen de la Caridad como Patrona de Cuba se hizo por el Papa Benedicto XV en respuesta a una petición de los veteranos mambises, y también que el nombre completo del Titán de Bronce es Antonio de la Caridad Maceo y Grajales, bautizado así por la devoción a la Virgen de su madre Mariana Grajales, y que su hijo también siguiera. El régimen, aunque no simpatice con la divulgación de esos hechos históricos, ha autorizado la llegada de la procesión con la imagen de la Virgen al mausoleo de Lomas del Cacahual, provincia de Artemisa, que guarda los restos de Maceo y Panchito Gómez Toro y le ha dado todo su respaldo organizativo a esa visita con el ceremonial militar correspondiente.

No es nada creíble que Raúl Castro a su edad vaya a adoptar públicamente una religión como hizo Daniel Ortega, pero sus concesiones de más espacios para la Iglesia van a ser una señal de más tolerancia religiosa para los que le sucedan al frente del régimen. De ese modo llegamos al fin de año, que los habaneros celebrarán no con una fiesta por el nuevo aniversario de la fracasada Revolución, sino con una gran misa en la capital.

Luego vendrán las que oficie Benedicto XVI a fines de marzo, que contarán con la presencia de los principales jerarcas raulistas. A diferencia del caso del cardenal Obando en Nicaragua, no parece plausible que Jaime Ortega sea relevado repentinamente del arzobispado de La Habana a pesar de estar en edad de retiro. Ha sido muy útil al Sucesor como instrumentador de la excarcelación-destierro de presos políticos a España, y así se ha convertido en el principal contacto con el régimen al más alto nivel.

En los tiempos que se aproximan con la puesta en práctica de soluciones neo-liberales muy radicales para echar a andar la etapa neocastrista de la “Revolución”, son necesarios grandes aportes caritativos por parte de la Iglesia para paliar la agudización de las desigualdades. Tampoco les vienen mal a los jerarcas comunistas los consejos oportunos de quienes, -como los prelados católicos cubanos-, tienen gran interés que continúe sin grave alteración de la paz social este ambiente de tolerancia religiosa que favorece su proselitismo. Pero, ¿se quedará ésta alianza en un plano solamente táctico?

A mediados del siglo XIX y frente a los sucesos revolucionarios que estremecían a Europa, Austria organizó un verdadero estado policiaco, que pretendía a cambio de gran eficiencia administrativa y del progreso material, que el pueblo se olvidase de la libertad. Un demócrata de la época planteó que aquel régimen se sustentaba en “un ejército de soldados en pie, un ejército de funcionarios sentados, un ejército de sacerdotes arrodillados, y un ejército de delatores arrastrándose”.
Lograr la combinación horriblemente eficaz, de esos cuatro tipos de servidores garantizaría cierta estabilidad para caudillos, jerarcas y tiranos como los que se han descrito en este trabajo.

Afortunadamente, aunque la frase arriba citada encierra una regularidad histórica, sabemos también que ni todos los soldados obedecen ciegamente las órdenes, ni todos los sacerdotes se doblegan ante el líder de turno.

Esperemos que en Cuba esto último se cumpla.

tomado de:
 http://www.cubanalisis.com

martes, 27 de diciembre de 2011

Presente:"Futuro luminoso" prometido a los cubanos por más de medio siglo.

Imágenes que muestran el futuro luminoso alcanzado por todos aquellos que creyeron en las promesas del castrocomunismo cuando Fidel Castro y su pandilla en 1959 se apropiaron del poder  en Cuba. Generaciones de cubanos ingenuos que creyeron en el poder mesiánico de un ególatra y su pandilla; generaciones completas que sacrificaron sus vidas en aquel presente "heroico" que hoy es un horrible e inhumano futuro, agravado cada día más por las nuevas leyes impuestas por el heredero en el trono. Futuro-presente sin salida para los que se enfrentan a esa realidad y que  ya han perdido todas las esperanzas de una vida mejor. ¡Pobre Cuba!
Cuando miro estas fotos y leo noticias como esa que reproduzco al final de este post, mi corazón se encoge y mi sangre hierve en mis venas.
La vida me ha demostrado ampliamente que el sadismo existe porque existe el masoquismo.

SANTA CLARA, Cuba,(José Lino Asencio López, www.cubanet.org ) – En días pasados la dirección nacional de la Asociación de Combatientes de la Revolución Cubana, informó a los excombatientes que recibían pensiones de ese organismo en Santa Clara, que debido a nuevas disposiciones, el pago de sus pensiones quedaba suspendido.

Según la fuente, que pidió anonimato, a los veteranos combatientes les quitaron las pensiones, que se les pagaban como reconocimiento a su labor militar a favor del régimen. La pensión de estos ex combatientes, era independiente y adicional a la que reciben todos los jubilados por la Seguridad Social, que generalmente no sobrepasa los 10 dólares mensuales.

La fuente añadió que: “Esta situación ha generado malestar entre los antiguos camaradas que combatieron en las guerras de la revolución y tenían esa pequeña prebenda. Hasta el momento no se sabe si en sus casos se unificarán las dos pensiones en una sola, o cómo piensa la mayoría, eliminen la pensión adicional de los ex combatientes y se queden solamente con la de la Seguridad Social, como el resto de los jubilados, porque según el presidente Raúl Castro hay que ahorrar y acabar con las gratuidades”.

sábado, 24 de diciembre de 2011

viernes, 23 de diciembre de 2011

Como celebraban los pobres la Navidad en los campos cubanos antes del socialismo.

 
 Palabras pronunciadas por Mons. Agustín A. Román, Obispo Auxiliar Emérito en la Peña Vareliana el 18 de Diciembre de 2010 (Miami, Florida)

Mons. Agustín A. Román
Pasé mi infancia en el lindo campo de Cuba. Con mis padres campesinos y mis hermanos vivimos una niñez y adolescencia pobre sin faltar lo necesario, pero muy feliz. Mi casa era un bohío amplio y fresco con techo de guano y con las habitaciones necesarias para descansar. El agua pura nunca faltó pues se sacaba del pozo del patio que era profundo, y siempre la teníamos en abundancia. No teníamos luz eléctrica pero, acostumbrados a las lámparas de aceite, no creíamos necesitarla.

El campo lo trabajábamos todos dirigidos por mi padre, y la comida siempre sobraba. Recuerdo que mis padres agradecían a las personas que se acercaban en busca de las frutas, porque eran tan abundantes, especialmente el mango, que caían a la tierra y las abejas volaban sobre ellas buscando el néctar en sus jugos. Más de una vez sufrimos la picada de aquellos insectos y las consecuencias eran desagradables.

A los 15 años me enviaron al poblado de San Antonio de los Baños porque los cursos en la escuela del campo sólo llegaban hasta 6º grado. Allí hice el 7º y 8º grados que eran llamados entonces Primaria Superior.

Dentro de este marco feliz vivimos nuestra niñez y adolescencia, y dentro de aquel inolvidable mundo de tierra poblada de verdes árboles siempre recuerdo las Navidades. Los campos se cubrían de unas flores silvestres blancas salpicadas de morado. Eran llamadas “aguinaldo” y con su olor anunciaban el Adviento desde finales de noviembre, y el colorido sobre la verde hierba de los potreros hacía que pareciera como adornada por un buen artista.

Al comenzar los duros inviernos del norte, las aves nos iban llegando como turistas y en el cielo azul las veíamos divertirse aprovechando la temperatura que habían perdido. Desde el comienzo de diciembre las casas siempre se pintaban con el blanco de la cal y las puertas con los colores de la bandera patria, azul y rojo. Los tres colores relucían.

Las mujeres cosían las ropas que vestiríamos en Navidad y Año Nuevo y todo se iba preparando. En mi casa hacían un nacimiento que comparado con los de hoy tenía pocas figuras, pero el misterio relucía en un lugar preferencial del bohío donde no faltaban la Virgen, San José y el Niño. Como carecíamos de luz eléctrica, utilizábamos la electricidad de la batería que mantenía la radio.

Aunque diciembre no era el tiempo mejor para las flores porque las lluvias habían desaparecido con el otoño y no había regadío, recuerdo que Mamá siempre las cultivaba para hacer adornos desde el día de Nochebuena hasta el primero del año. Las mujeres iban preparando el buñuelo y la miel desde temprano. Recuerdo ver los tableros llenos de harina de yuca para prepararlos. Se cocían los dulces de frutas, de manera especial los de papaya, coco, naranja y ciruela. Daban gran importancia a la preparación de una variedad de postres y a compartirlos con los vecinos.

Las familias soñaban con las fiestas que comenzaban con la Nochebuena. El día 24 se preparaba el lechón que era la carne preferida, aunque a las personas mayores se les ofrecía optar por la gallina de guinea o el pollo. No recuerdo nunca haber comido el pavo. Desde temprano alguien de la familia iba a la población a comprar el arroz, los frijoles y todo lo restante, y se traía el vino que se tomaba en los campos tan sólo en esta festividad y al terminar la Semana Santa, en la fiesta de la Pascua de Resurrección. El vino de frutas se hacía en los hogares desde el principio del año para que estuviera bueno en ese momento. En Navidad nunca faltó el turrón.

Unas familias iban a compartir con otras y traían las golosinas que habían preparado. La mesa se adornaba dentro de la casa aprovechando la luz de las lámparas ya que fuera la luz de la luna y de las estrellas, que bien resplandecían durante este tiempo, no era suficiente. Terminada la comida comenzaba la canturía para la mayoría que no podía ir a la Misa de Gallo, que por la distancia teníamos que salir temprano para llegar a las 12 y regresar muy pasada la media noche.

En la canturía se emocionaban algunos jóvenes, dirigiéndose a las jóvenes exaltando su belleza con gran franqueza gracias al entusiasmo que les daba el vino. En ese momento se descubrían los enamorados sin temor al respeto de los padres.

Se sabía que la celebración era por el nacimiento de Cristo, pero la carencia de catequesis no les permitía saborear el misterio de un Dios hecho hombre por amor a todos los hombres. Tal vez aquello contribuyó a que yo escogiera el sacerdocio pues en la medida en que iba conociendo más a Cristo y su Iglesia, iba descubriendo cómo en la mayoría de nuestro pueblo estaban todos bautizados pero ahí se quedaban dormidos.

Allí comencé yo más tarde una catequesis semanal a la que venía un gran número de niños que se preparaban para la primera comunión. Esto hizo que el párroco comenzara una misión anual de tres noches que en casa se llenaba y les instruía en la fe. Este despertar misionero en mí fue el fruto de la Acción Católica Cubana que pretendía, en los años ’40 y ’50, hacer una Cuba creyente y dichosa donde Cristo reinara en los hogares primero y en la sociedad también.

Esta evangelización era aun incipiente y mucho prometía, pero en los ’60 terminaba con la implantación del comunismo que puso fin hasta a la Navidad y Semana Santa, perdiendo así el pueblo la alegría que hacía feliz su vida. Las fiestas religiosas, en especial Navidad y Semana Santa fueron desapareciendo en poco tiempo y la alegría también desapareció con ellas, naciendo el terror a expresar todo sentimiento religioso exterior, ya que esto podía hacer perder a los hijos oportunidades ventajosas.
La visita del Santo Padre Juan Pablo II en enero de 1998 abrió algunas puertas a los creyentes, entre otras el resucitar costumbres como la celebración de la Navidad de manera pública. Pero la fe de la clase campesina, que tradicionalmente transmitía sus costumbres de generación en generación, existe hoy en día después de medio siglo en que ha pasado el huracán comunista. Pensaba que no. Sin embargo, el recorrido de la imagen de la Virgen por toda la Isla y que comenzó en Oriente el pasado septiembre, va demostrando que la fe parece dormirse, pero sorprende cuando resucita.
(Gaceta de Puerto Principe)

jueves, 22 de diciembre de 2011

Integralidad:Doble moral en las aulas cubanas.

Por:Lizandra Díaz Blanco
En el intento de crear el hombre nuevo el sistema educacional cubano ha enarbolado por décadas el principio de la integralidad, otra arista de la doble moral que en este caso garantizaría una oportunidad laboral privilegiada.
Participar en los juegos deportivos universitarios, actuar en los festivales de artistas aficionados, y manifestar el apoyo incondicional al régimen, son algunas de las exigencias para ser un estudiante integral. Cada cierto tiempo el grupo de alumnos tiene que reunirse y evaluarse mutuamente, incluso hay casos en los que se asigna una nota.
Eliécer Ávila, graduado en la Universidad de Ciencias Informáticas, hoy residente en Las Tunas, aclara que para resultar integral es importante el rendimiento académico, pero “tiene un peso muy importante todo lo que se refiere al aspecto político y la participación en todas las convocatorias de masas. Cualquier tema que tenga que ver con la convocatoria oficial tiene un peso enorme, así como los criterios que se expresan o pertenecer o no a la UJC (Unión de Jóvenes Comunistas).”
“Ser integral -continúa Henry Constantín- es ser de todo un poco, lo mismo hay que participar en los primeros de mayo, desfiles, tribunas abiertas, trabajos voluntarios, brigadas de distribución de bombillos, Brigadas Estudiantiles de Trabajo, inclusive hay que estar dispuesto a participar y a participar, de hecho, en actos de repudio a opositores. Hay muchachos que han perdido la integralidad por negarse a participar en actos de repudio.”
Constantín ha estudiando en tres universidades de la isla: Santiago de Cuba, Santa Clara, y El Instituto Superior de Arte en La Habana, y en su experiencia el rigor en las reuniones de integralidad varía de un centro de estudios a otro según “la furia del momento”, y asegura que “como todo en este país la exigencia política se está desmoronando.”
De acuerdo con lo vivido por Ávila ser catalogado como estudiante integral es fundamental. “Yo presencié análisis sobre estudiantes que por ejemplo habían tenido dificultades en el aspecto docente, sin embargo eran artistas aficionados que ‘habían sacado la cara’ por la universidad y eran deportistas que siempre cogían medallas en los juegos universitarios o eran activistas políticos muy dispuestos y estos aspectos los salvaban e incluso los ponían por encima de otros, que tenían más meritos docentes.”
La principal motivación de los estudiantes que intentan ser de todo un poco es recibir una buena ubicación laboral una vez graduados, pero la realidad prueba lo contrario.
“Más que la integralidad lo que ayuda a salir adelante son las relaciones. Pero en algunos casos influye y determina, por ejemplo un estudiante de periodismo que no sea integral está ‘embarca'o’; el médico si no es integral no podrá poner un pie nunca en una misión internacionalista,” asegura Constantín.
Incluso la posición oficial sobre el tema, en palabras del responsable de docencia en la Federación Estudiantil Universitaria, Leonardo Domínguez Martín, publicada en la revista universitaria Alma Mater, es clara: “el estímulo moral deviene mayor recompensa a quienes se les considera integrales. La integralidad no se debe asociar con la ubicación laboral. No se puede pensar o aspirar a la integralidad para obtener una buena ubicación. Después de la universidad ocuparemos el puesto donde la revolución nos considere más útiles.”
“La aspiración de por sí ya entra en un problema de inexistencia: aspirar a que todo el mundo pueda manifestarse exitosamente en todas las esferas que tiene que ver con un estudiante es una aspiración idílica, porque usted no puede ser bueno en todo. Yo siempre he creído que usted para ser bueno en algo debe dedicarle la mayor parte de su tiempo, practicarlo mucho y disfrutarlo,” comenta el joven tunero sobre la aspiración de los múltiples talentos.
El recién graduado Reynaldo Adriles opina que convertir el desarrollo integral de un joven en una obligación es “ante todo un intento de crear un tipo de persona que no es real. Y es algo errado en el sentido de que pretenden tratar de desarrollar a todos en los mismo carriles y no creo que haya dado tan buenos resultados, porque se han perdido excelentes estudiantes tratando de que sean un abanico cuando ellos pueden ser una espada.”
Fuente:
http://www.cubanalisis.com/CUBA%20EN%20LA%20PRENSA%202011/INTEGRALIDAD%20DOBLE%20MORAL%20EN%20AULAS%20CUBANAS.htm

martes, 20 de diciembre de 2011

La doctrina martiana en el hip hop cubano. Escuadrón Patriota

Gricel González/ martinoticias.com
 
Por Grisel González. http://www.martinoticias,com/
“Cubanos todos donde quiera que estén” es el llamado del cantante Raudel del grupo de hip hop underground cubano, Escuadrón Patriota, que por primera vez sale de Cuba para  grabar un mini disco en Ecuador.
“Mi función es hacer un disco que estoy preparando con un concepto para la diáspora y el exilio de los cubanos, y esa fue la parte que vine a hacer acá”, asegura en entrevista a martinoticias.com.
A pesar de que su salida de Cuba se retrasó dos meses y fue un trámite “pesado”, Raudel trabaja duro para terminar la grabación, que cuenta con el apoyo del proyecto artístico Tranvía Cero.
Se trata de un proyecto de Ana Olema, una artista visual que está haciendo una investigación sobre el exilio cubano, fundamentalmente en Ecuador. Ella está preparando un libro y el cierre del mismo son como himnos, canciones himno” que las interpreta Raudel.
“Las canciones son muy emotivas, canciones muy fuertes también, bueno todo el que conoce mi trabajo sabe que yo soy muy explícito, independientemente de que uso mucha metáfora y mucha poesía pero soy muy claro en mi mensaje y era también lo que yo quería hacer, algo que le debía también un poco a los hermanos cubanos que están fuera, que en cada tema en cada canción yo siempre estoy tocando porque me interesa mucho la reconciliación, esa reunión o reunificación de todos los cubanos donde quiera que estén porque si, si estoy completamente conciente de que esa transformación ese cambio en Cuba va a llegar cuando todos los cubanos donde quiera que estén comiencen a sentirse como eso como un solo cubano y empiecen a trabajar sobre esa base, si no, vamos a seguir machacando ahí en lo mismo y en lo mismo”.
Comenta que está inspirado en José Martí para este trabajo “en mi mensaje voy a ser mucha alusión a la intención y al concepto de Martí de patria, de lo que era la Cuba que el quería para los cubanos, que al final llevamos 200 y pico de años y todavía no acabamos de concretar la Cuba que queremos”.
Mientras se encuentra en Ecuador, el artista publicó el adelanto sobre el lanzamiento de su nuevo disco “Somos la Raíz del Cambio”, que incluye canciones como Revolución Urbana que dice así:

La nueva revolución está en mis lápices,
y en los corazones de millones,
que ya no hay quien los controle.
Convicciones, están listos los escuadrones.
Las dictaduras se derrotan con revoluciones…
Que se incorporen las generaciones,
No con los temores
Banderas en los balcones.
Pueblo no me traicionen.
Puños arriba en señal de victoria.
Pa’ los cubanos se acerca una época de gloria…
Levantarse, tomar el control y seremos victoria
No manipulación con la televisión,
Libre la educación de la dominación de idea,
Necesitamos una nueva visión…

Raudel confiesa la preocupación de su madre que “está muy asustada y muy temerosa de lo que me pueda suceder en toda esta historia de la música hip hop y el mensaje que mando, un tema bastante serio para ella…”.
Escuadrón Patriota:
Somos la raíz del cambio

lunes, 19 de diciembre de 2011

La Cuba revindicada por los hermanos Castro y su mafia moncadista.

Las pandillas de Mantilla.
Lo normal es salir de movida un sábado por la noche con punzones, navajas, tijeras, machetines recortados y alguna pistola de confección casera, armada con un percutor de un viejo revólver y unas ligas gruesas.

Foto: Reuters
Por:Iván García/ Especial para martinoticias.com  
Entre flashes intermitentes de neón, ron y música reguetonera del Micha, Osmany García y Los Cuatro, bailan como solo saben hacerlo los 'reparteros'.
Hoy Joan, 19 años, quiere una noche movida. Pasada las 7 de la noche, luego de comer  arroz, frijoles y un par de croquetas de pescado, se viste a la usanza de un joven cubano del tercer milenio.
Jean Diesel entallado, camisa arrugada ceñida y una chaqueta negra de cuero que le da esa pinta de pandillero juvenil que Joan adora. Zapatillas de punta fina, reloj Swatch de colores subidos, gargantilla de fantasía y un celular pirata chino, un remedo del iPhone 3G.
Antes de salir de casa -si podemos llamar casa a una chabola de madera y techo de fibrocemento, con muebles espartanos de principios del siglo 20- recoge su navaja afilada de barbero que guarda debajo de la colchoneta de un catre paticojo.
Es la norma de muchos adolescentes citadinos. Sobre todo si se vive en Mantilla, un reparto al sur de la ciudad, ubicado en el municipio Arroyo Naranjo, el más pobre y violento de La Habana y con el mayor número de hombres presos en la capital.
Lo más parecido al Oeste salvaje que hemos visto en filmes estadounidenses, son algunos bailables populares habaneros. Entre reguetón y ron de cuarta categoría, una generación de adolescentes que por regla crecieron, sin un padre conocido o con sus progenitores en una cárcel de la Cuba profunda, suelen ver las fiestas juveniles o discotecas de baja estofa como un campo de batalla.
La diversión pasa por fumar un par de porros de marihuana. Criolla o 'yuma' (extranjera), si se anda bien de plata, y darse un ‘cantazo’ de melca. O comprar un 'magazín' de Parkisionil y ponerse en las nubes.
Joan se une a sus socios del barrio. Entre todos compran media docena de unas cajitas de ron blanco conocidas como “Planchao”, y recogen a sus ‘jevitas’ (muchachas), jineteras unas, marginales otras, que no pocas veces portan armas blancas y en sus bolsos de piel sintética guardan el arsenal de la banda.
Lo normal es salir de movida un sábado por la noche con punzones, navajas, tijeras, machetines recortados y alguna pistola de confección casera, armada con un percutor de un viejo revólver y unas ligas gruesas.
Su efectividad es dudosa. La bala perdida puede dirigirse hacia cualquier sitio. Pero es un arma de fuego y siempre intimida. La pandilla que lidera Joan esa noche tiene prendidas las alarmas.
El fin de semana anterior, un malandro de otra zona, le cortó el rostro con dos 'swings' de navajas a un amigo de Joan. Y el grupo va por el desquite. En la ley del bajo mundo capitalino, la sangre se paga con sangre.
En un sitio derruido fuera de la discoteca ‘clavan’ el arsenal bélico. Entre flashes intermitentes de neón, ron y música reguetonera del Micha, Osmany García y Los Cuatro, bailan como solo saben hacerlo los 'reparteros', argot utilizado para los residentes en barrios alejados del centro de la ciudad.
Un miembro de la pandilla ya identificó a uno de los jóvenes de la banda rival que desfiguró el rostro de su socio. Cuando termina el reguetón comienza la guerra.
La de los contenedores de basura virados en la calle y el intercambio de palabras gruesas. Cada pandilla desenfunda sus armas. Al compás del lanzamiento de piedras y pomos y algún que otro tiro errado de las peligrosas pistolas caseras, donde cualquier transeúnte despistado puede recibir una herida de bala.
Detrás de las ventanas los vecinos observan la gresca. A ratos es más ruido que otra cosa. No pocas veces terminan con un adolescente desangrándose en el asfalto, después de un baño implacable de navaja. La policía casi siempre suele llegar tarde. O no llega.

Fuente:A-golpe-de-navaja-